TEMA 33 DEBERES DEL CRISTIANO PARTE 2

Base Bíblica: Mateo 6:2-4 Cuando, pues, des limosna, no hagas tocar trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.

Mas cuando tú des limosna, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha, para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

TEXTO A MEMORIZAR: MATEO 6:1 Cuando ustedes hagan una buena acción, no lo anuncien por todos lados; de lo contrario, Dios su Padre no les dará ningún premio.

INTRODUCCION: A lo largo de este Sermón, nuestro Señor está interesado en la motivación, en los pensamientos ocultos del corazón. En su exposición del sexto y séptimo mandamiento indicó que tanto el asesinato como el adulterio pueden cometerse en nuestros corazones, que el enojo injustificado es una clase de asesinato del corazón y la codicia se ve como un tipo de adulterio del corazón. En el asunto de dar, tiene el mismo interés en los pensamientos secretos. La pregunta no se refiere tanto a qué hace la mano (si entrega dinero en efectivo o un cheque) sino a qué piensa el corazón mientras la mano hace aquello. Existen tres posibilidades. O buscamos la alabanza de los hombres, o mantenemos nuestro anonimato pero calladamente nos congratulamos, o estamos deseosos de la aprobación de nuestro Padre divino nada más. (John Stott El Sermón del monte pág. 147)

O.T.  Examinaremos la conducta de los hipócritas respecto a las limosnas.

Marcos 12:41-44 Un día, Jesús estaba en el templo, y se sentó frente a las cajas de las ofrendas. Allí veía cómo la gente echaba dinero en ellas. Mucha gente rica echaba grandes cantidades de dinero. En eso llegó una viuda pobre, y echó en una de las cajas dos moneditas de poquísimo valor.

Entonces Jesús dijo a sus discípulos: —Les aseguro que esta viuda pobre dio más que todos los ricos. Porque todos ellos dieron de lo que les sobraba, pero ella, que es tan pobre, dio todo lo que tenía para vivir.

CUAL ERA LA CONDUCTA

A.      No lo hacían por obediencia a Dios ni por amor al prójimo; sino por orgullo, soberbia, vanidad, vanagloria.

B.      Sus acciones eran con una simple finalidad de ser visto y eso era lo que conseguían, ser vistos, admirados, y respetados; pero era todo lo que recibían, no hay nada guardado para ellos en la otra vida, la recompensa del cielo. Jesús nos ilustra lo ostentoso de estas acciones con la expresión, “tocar trompeta”. Así como la trompeta atrae la atención de un soldado, las ofrendas traen la atención de la gente.

C.      Su ofrenda no era producto de un corazón agradecido, sino un deseo de reconocimiento.

D.     Su ofrenda no era un acto de adoración a Dios sino a sí mismo.

¿COMO OFRENDAR ENTONCES?

Es importante observar que Jesús no dice que no ofrenden, el problema es un problema del corazón, 2Corintios 9:7; el acto no sincero es el que se condena, y nos dice cómo hacerlo:

A.      Generosamente: En la cultura hebrea la mano derecha es la mano de la bendición, del honor, del poder, de la protección, nos motiva a ofrendar sin reservas, con generosidad, confiados y agradecidos.

B.      En secreto:

a)      para no llamar la atención.

b)      Para no avergonzar a los que no pueden dar más.

c)      Para no auto complacerse.

d)      Para olvidar pronto a quien dimos y cuanto dimos.

C.      Confiado: en la recompensa de nuestro Padre. Mateo 25:37

Que todo lo ve. Quien nos recompensa como un Padre y no como un patrón o un jefe. Es decir su recompensa es generosa, abundante, Malaquías 3:10-11

CONCLUCION: Es un mandato dar, es un deber, es una bendición, es una oportunidad de adorar a Dios, es nuestra fidelidad, obediencia, y generosidad.

APLICACIÓN: Si tu no estás dando analiza tus razones, examina tu corazón, y si lo estás haciendo conoce bien porque razón lo haces, más que tu dinero Dios busca tu corazón, Dios desea recompensarte en público por lo que tú y yo le damos y hacemos en privado.