EL VALOR DE LOS
PROBLEMAS
Pasaje bíblico: Jer 17:7 Bendito el varón que confía en
Jehová, y cuya confianza es Jehová.
Jer 17:8
Porque será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus
raíces, y no verá cuando viene el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de dar fruto.
Versículo
para memorizar: Sal 91:1 El que
habita al abrigo del Altísimo
Morará
bajo la sombra del Omnipotente.
Sal 91:2 Diré
yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo
mío;
Mi
Dios, en quien confiaré.
Objetivos:
·
Aprender cual es la actitud correcta para enfrentar los problemas.
·
Animar a las personas que están atravesando situaciones difíciles para
que aprendan a valorar los problema, es necesarios.
·
Concientizar a las personas de que las pruebas son necesarias para
nuestro crecimiento y nuestro llamado.
Introducción: la mayor parte de las
veces, huimos de las pruebas, no nos gustan. ¡¿a quién le gustan las pruebas?!
Pero, hoy es el momento de cambiar nuestra mentalidad; pues si queremos ser
personas maduras y más productivas en la obra de Dios, es necesario que las pruebas
vengan; y no solamente que vengan, sino que también podamos tener la actitud
correcta para alcanzar el propósitos de las mismas. Es un proceso largo y
tedioso, sin embargo, cuando entendemos que lo que debemos hacer es gozarnos en
medio de cualquier situación, obtenemos la victoria, pasamos a otro nivel y
recibimos más autoridad en el mundo espiritual.
El mensaje para hoy. El valor de los
problemas
Una de las formas para saber que le
estamos dando el justo valor a los problemas, es cuando a pesar de ellos,
podemos sentir un gozo y una alegría que se expresa en nuestro rostro, (El corazón alegre hermosea el rostro.
Proverbios 15:13); pues esto demuestra la fe que tenemos, en que Dios está
con nosotros en cualquier situación que estemos pasando. Otra forma de darle
valor a los problemas es examinándolos determinadamente, con sabiduría
(buscando la raíz del problema) para poder corregir lo que no esté bien. En
medio de cualquier situación, debemos regocijarnos y glorificarnos y glorificar
a Dios, teniendo presente que Jesús viene por nosotros; y que esta es nuestra
esperanza.
¿Qué es esperanza?
Es la espera
de una certeza futura (todo se va a solucionar, saldrá bien), basada en una
promesa presente (En Cristo somos más que vencedores) que todavía no ha sido obtenida (tiempo del
problema).
Hay personas
que sufren por ser desobedientes, por no preguntarle al Señor su voluntad; sin
embargo, aun en esta circunstancia, cada problema nos ayuda a crecer; esto es,
si tomamos la actitud correcta. No es fácil gloriarse o regocijarse en medio de
un problema; pero, es posible hacerlo cuando se entiende el valor de problemas
y las tribulaciones y cuanto crecimiento pueden traer a nuestras vidas.
¿Qué es un problema o una
tribulación?
Es una
situación difícil que se debe resolver; dificultades, adversidades, disgustos,
penas, situaciones que van en contra de nuestras metas. En las tribulaciones,
se nos pone presión; nuestro ego, nuestro carácter y todo nuestro ser son
apretados o machacados. Pero esto, Dios lo permite con propósito; el cual
debemos averiguar en oración y ayuno.
Pablo dice
en Romanos 5.2-4
“…Por quien también tenemos entrada
por la fe a esta gracia en la cual estamos
Firmes, y nos gloriamos en la
esperanza de la gloria de Dios. Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo
que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba,
esperanza…”
En otras
palabras, así como nos gloriamos por la esperanza de la gloria de Dios, también
nos gloriaremos cuando nos estén apretando; nos gloriaremos cuando estemos
siendo machacados…
“Y también todos los que quieren
vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución…”. 2 Timoteo 3:12 (Van
a ser machacados).
Dios no se impresiona con las obras
del creyente, sino con como actuamos cuando somos puestos bajo presión y
estamos siendo apretados. Pues El siempre está pensando en desarrollar nuestro
carácter, el cual, generalmente, es formado cuando estamos siendo
machacados. Por esto:
“Amados, no os sorprendáis del fuego
de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese,
sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para
que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría”. 1 Pedro
4:12,3
En vez de
ver el problema o la tribulación como algo extraño, deberíamos decir: “Señor,
gracias por este problema con mi hijo, con este hermano, con mi trabajo,
etcétera”. Esto solo se logra cuando podemos apreciar el valor de los problemas;
cuando sabemos que Cristo nos da a victoria, y que al final seremos mejores.
Cuando ustedes tengan una dificultad, una adversidad, un reto contrario a sus
metas, soluciones que van en contra de su propósito, no se sorprenda; regocíjese,
dance, alabe al Señor porque es una oportunidad para producir paciencia.
¿Qué es la paciencia?
Es tener
constancia en el ánimo cuando se enfrentan problemas. Es aceptar con valor y
coraje las situaciones que la vida y las personas nos presentan. Es la
habilidad de soportar las cosas sin legar a la desesperación; sino, por el
contrario, permaneciendo con ánimo y constancia.
“pero en cuanto a vosotros, oh
amados, estamos persuadidos de cosas mejores, y que pertenecen a la salvación,
aunque hablamos así. Porque Dios no es injusto para olvidar vuestra obra y el
trabajo de amor que habéis mostrado hacia su nombre, habiendo servido a los
santos y sirviéndoles aun. Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la
misma solicitud hasta el fin, para plena certeza de la esperanza, a fin de que
no hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia
heredan las promesas”. Hebreos 6:9-12
Las personas
que son consientes de la existencia del Reino de Dios y son constantes en toda
circunstancia, heredan las promesas. Las personas que han superado las pruebas,
que han tenido una experiencia de primera mano y han vencido, son más fuertes
ante los problemas que aquellas que han pasado por la vida sin mayores dificultades.
Juan
8:31 Dijo entonces Jesús a los judíos
que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;
Juan
8:32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Si confiamos
en el Señor plenamente, quiere decir que somos realmente sus discípulos y que
la verdad está en nosotros y que esta verdad nos hará libre de cualquier
problema, una persona que tenga un argumento errado por falta de una
experiencia, siempre estará bajo la misericordia de aquel que si la ha
tenido. Por esto, es que los problemas y
las tribulaciones son muy importantes en nuestra vida pues nos ayudan a tener
una experiencia cercana con Dios. Las personas que han podido atravesar una
circunstancia difícil, pueden dar testimonio de la verdad pos su experiencia
vivida.
Ilustración: Hay quienes dicen que la liberación
y la sanidad no son bíblicas, y que no son importantes. Pero la persona que ha
sido transformada después de una liberación, y la que ha sido sanada después de
que los médicos no daban ninguna esperanza, saben que la liberación y a sanidad
son verdades irrefutables.
“respondió
Job a Jehová, y dijo: yo conozco que todo lo puedes, y que no hay pensamiento
que se esconda de ti. ¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento?
Por tanto, yo hablaba lo que no entendía; cosas demasiado maravillosas para mí que yo no comprendía. Oye, te ruego,
y hablare; te preguntare, y tú me enseñaras. De oídas te había oído; mas ahora
mis ojos te ven”. Job 42.1-5
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