Base Bíblica:
Entonces
Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo.(A)
Y
después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.
Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres
Hijo de Dios, dí que estas piedras se conviertan en pan. El respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda
palabra que sale de la boca de Dios.(B) Mat 4:1- 4
Versículo para memorizar:
Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las
cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, Efe 3:20
OBJETIVOS:
·
Conocer la importancia del ayuno para llevar
nuestro cuerpo al límite.
·
Identificar las tres categorías de la tentación.
·
Conocer algunos factores que nos ayudaran a
vencer las tentaciones.
INTRODUCCIÓN:
Anteriormente vimos que era la tentación, su origen, su
propósito y que el hombre puede ser tentado pero; Dios no, porque él no tiene malos deseos en su
ser como los tiene el hombre.
Por esto debemos tener en cuenta que una cosa es cuando
somos probados y otra cuando somos tentados
por el mundo por Satanás y también por nuestros malos deseos que nos incitan a hacer el mal.
EL AYUNO UNA FORMA DE
VENCER LA TENTACION
CRISTO EL UNGIDO;
JESUS EL HOMBRE
El ayuno que hizo no
fue para fortalecer a Cristo el Ungido sino; para fortalecer a Jesús el Hombre
QUE BUSCABA JESÚS AL
AYUNAR?
·
Buscaba llevar a su carne hasta el límite.
·
Aumentar la capacidad del poder de Dios en su
vida.
Cuando ayunamos, lo que hacemos es aumentar la capacidad del
poder de Dios para que fluya dentro de nosotros y haya mayor actividad
espiritual. Para aquello a que nunca han ayunado, no saben qué tipo de calidad
de energía espiritual puede fluir a través de su cuerpo. El ayuno consagra
nuestro cuerpo, y el Espíritu se abre a un mayor nivel de poder de Dios activo
en nosotros. Para estar en control y dominio en el espíritu, se debe llevar la
carne y el cuerpo hasta los limites. Por eso es que, ayunar es un arma
poderosa; nos ayuda a combatir toda tentación que está relacionada con nuestra
carne o con el enemigo.
Mat 17:21 Pero este género no
sale sino con oración y ayuno.
La tentación no es para probarle algo a Dios, sino para
probarse a usted mismo sus fortalezas y sus debilidades. El enemigo siempre
está buscando saber quién es fuerte y quien es débil, quien reclama que es
salvo y quien es, verdaderamente, Cristiano.
EN LO QUE SE REFIERE
A LA TENTACIÓN, HAY 3 CATEGORÍAS.
Estas son las básicas y las que el enemigo SIEMPRE le va a
presentar; pues él no tiene nada nuevo.
1Jn 2:15 No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
1Jn 2:16 Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.
1.
Los deseos de la carne.- son aquellos que provienen de nuestro
hombre viejo.
2.
Los deseos de los ojos.- son todas aquellas cosas las cuales vemos
y desatan dentro de nosotros la codicia y la avaricia.
3.
La vanagloria de la vida.- esta es la más peligrosa y la más
sutil; tiene que ver con la exaltación de nuestro ego, el deseo de jactarse de
lo que uno ha llevado a cabo, el deseo de sobresalir, etc.
Estas son las mismas
tentaciones que uso el enemigo en el huerto del Edén, y después, con Jesús. Genesis
3
La mente, y el arma de la tentación es la sugerencia. La guerra no es
en nuestro espíritu sino en nuestra mente. El enemigo no puede leer su mente,
lo único que puede hacer es sugerir ideas, pensamientos y está en usted que
obedezca a su mente o no.
El enemigo no lo puede
destruir si usted no acepta la sugerencia.
Cuarenta días atrás había sido dicho que Jesús era el hijo de Dios. La
voz desde el cielo proclamo: “este es mi hijo amado”. Entonces, después de los
cuarenta días de ayuno, Jesús tuvo hambre; y, naturalmente, Jesús estaba
hambriento; biológicamente, era tiempo de comer, y viene el diablo y le dice:
“Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan”. Pero Jesús sabía que
su habilidad no había sido dada para su propio beneficio; su poder no era para
satisfacer a sí mismo o sus necesidades, sino para un propósito mayor.
ILUSTRACIÓN: El diablo puede sugerir nuestra mente muchas cosas, por ejemplo:
“tienes derecho a sentirte bien”, “usa droga otra vez”, no te tratan bien en la
iglesia?, “tienes derecho a murmurar”, “tienes derecho a desanimarte”, etc.
COMO VENCEMOS LA TENTACIÓN
DE SATISFACER LOS DESEOS DE LA CARNE?
·
Disciplinándose.- lleve su carne, su ego hasta los
limites; sométase al espíritu santo y no siempre para la carne. Disciplínese en
el ayuno.
1Co 9:23 Y esto
hago por causa del evangelio, para
hacerme copartícipe de él.
1Co 9:24 ¿No
sabéis que los que corren en el estadio,
todos a la verdad corren, pero
uno solo se lleva el premio? Corred de
tal manera que lo obtengáis.
·
Estableciendo
prioridades.- cuando
una persona conoce el propósito de Dios para su vida, lo primero que determina
son sus prioridades.
1Co 12:7 Pero a
cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho.
Basado en sus
prioridades, determine su disciplina, por medio de la cual dirá: “NO A LA TENTACIÓN”
Como hacemos esto?
1. Viviendo en santidad: apartado del pecado.
2. Dándose en servicio: pensar en los demás
como una responsabilidad antes de satisfacer
nuestros propios deseos; y sobre
todo las cosas, tener un gran deseo y temor de Dios de no desagradarlo
Por ejemplo, si su prioridad es la oración, tratara de disciplinarse
en ella.
APLICACIÓN:
·
Hacer
un compromiso con el grupo (GPB) de establecer un día a la semana de ayuno.
Pueden ser diferentes días, asignados cada uno a cada persona hasta cubrir la
semana, y la próxima reunión, comentar los resultados. Tenga en cuenta que
pueden haber propósitos específicos, o simplemente, ayunar para tener mayor
fortaleza espiritual.
·
Concientizar
a las personas de que esto debe ser una disciplina que les ayudara a vencer
cualquier tentación.
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